Nos reunimos con Javier Enériz, Licenciado en Derecho por la Universidad de Navarra y Defensor del pueblo en la Comunidad Foral desde hace 14 años. Su sugerencia al Departamento de Cohesión Territorial del actual Gobierno acerca de la redacción de un proyecto a futuro para que un tramo de la N121A sea una vía 2+2, ha generado expectación ante la opinión pública y controversia dentro de dicho Departamento, que ha descartado tomar en consideración su propuesta alegando que sería «una irresponsabilidad técnica»
1. A comienzos del mes de septiembre vimos en los medios de comunicación que usted había sugerido al Gobierno la redacción de un proyecto para que, a largo plazo, los 44 km que separan Pamplona de Sunbilla sean una vía 2+2. ¿Cuáles son las razones que le han llevado a considerar que la construcción de una autovía sería la mejor opción para este tramo de la N121A?
Hace meses se publicó en prensa un artículo firmado por un Ingeniero de caminos, canales y puertos que además ha sido muchos años funcionario del propio Departamento de Obras Públicas. Este artículo planteaba una solución para la N121A compatible con el 2+1, que es la construcción de un desdoblamiento o vía 2+2 en el tramo comprendido entre Pamplona y Sunbilla, y nos pareció que era interesante trasladar la idea a la Administración para que la valorase. No es que el 2+1 esté mal, pero siempre planea la duda y el temor de si es suficiente teniendo en cuenta el elevado número de camiones que circulan por esta carretera. Lo que hemos planteado es que se aproveche la vía actual en la que se está construyendo el 2+1 para que el tramo más llano y más factible, esos 44 kilómetros, sea ampliado a un 2+2, ya que a partir de Sunbilla la orografía pone las cosas muy complicadas en este sentido.
2. El consejero de Cohesión Territorial, Bernardo Ciriza, desestimó la redacción del proyecto que usted proponía, ¿qué razones le ofreció al respecto?
Las razones que nos dio fueron descalificatorias hacia la propia Institución. Para Ciriza nuestra propuesta es nada menos que una irresponsabilidad, y remitió un escrito que prácticamente decía que ni siquiera iba a tomar en consideración nuestro planteamiento. No ofreció ningún tipo de argumentación técnica, pero sí una serie de alegatos que se centraban en poner en valor las vías 2+1, algo que no hemos puesto en juicio en ningún momento. Nos parece muy bien el 2+1 como solución, seguramente para la zona sea fantástico, pero tiene un problema, y es que el volumen de camiones que soporta es el que es, y esto probablemente plantee conflictos en muy poco tiempo. Ojalá me equivoque, pero es lo que se vaticina teniendo en cuenta que es la vía que más tráfico internacional soporta.
3. Las razones presupuestarias de Ciriza y sus socios parlamentarios chocan con la visión de partidos como Navarra Suma, que defienden la construcción de una autovía como solución a la N121A. ¿Ha podido usted reunirse con los diferentes partidos navarros para abordar este problema?
No me he reunido con ellos, pero conozco sus soluciones. Por supuesto yo he estudiado y barajado todas las alternativas. Además de la solución del 2+1 propuesta por el Departamento de Cohesión Territorial, otras fuerzas plantean por ejemplo el desvío del tráfico pesado por la A15, pero considero que sería muy problemático, ya que se trata de una autovía de montaña con muchos problemas de circulación para el transporte de mercancías. Si le damos a elegir al transportista seguirá yendo por donde va, la N121A, porque es mucho más segura y rápida para él, y, además, si le obligamos a circular por la A15, corremos el riesgo de que aumenten los accidentes en dicha autovía, pues las pendientes son muy elevadas. Otra alternativa sería la construcción de una autovía, pero eso plantea muchos problemas de financiación, ya que el coste sería elevadísimo, y también medioambientales. Podría valorarse la construcción de esa autovía mediante otros sistemas de financiación, como el peaje en sombra, pero es algo que rechazan la mayoría de grupos parlamentarios. Y quedarían dos opciones, la de la autopista, con un peaje directo y lo que ello conlleva, y la que yo he apoyado, es decir, la construcción de una vía 2+2 al menos desde Pamplona a Sunbilla, a largo plazo y en función de la disponibilidad presupuestaria. Es una opción que, como ya he dicho antes, el departamento de Cohesión Territorial descarta, y no se nos ha dado ninguna razón de por qué esto supondría una irresponsabilidad técnica y una locura más allá de la descalificación directa. Solo se nos intenta convencer de que la solución 2+1 es mejor que la 2+2, pero no llego a comprender como tener dos carriles sería peor técnicamente que tener uno. Estamos hablando de una de las tres grandes infraestructuras que tiene ahora mismo nuestra Comunidad sobre la mesa, junto al TAV y el Canal de Navarra, y no podemos caer en una mala solución, porque hablamos de la salida directa a Francia, de la opción que elige el transporte de mercancías por carretera. Así que en última instancia nos quedan dos soluciones: o pasan por esta vía los camiones, o no pasan. Pero si pasan, dudo que la solución del 2+1 sea la más adecuada.
4. Para Tradisna, la construcción de una vía 2+1 en la N121A es lo que podríamos denominar, “pan para hoy y hambre para mañana” y siempre hemos abogado porque esta vía se convierta en una autovía en su totalidad, con la consecuente negativa por parte del Gobierno. ¿Entiende usted la posición del transporte navarro?
Sí, por supuesto. Creo que debemos reflexionar, ¿cuál es la salida natural a Francia para el transporte de mercancías por carretera? Esta vía. Y comprendo que haya municipios a los que no les hace ninguna gracia y comprendo que a un Gobierno sin recursos económicos suficientes tampoco, pero la realidad es que esta situación está abocada a que el transporte pesado circule por la N121A, y probablemente en unos años la solución real sea la construcción de una vía 2+2. Ojalá me equivoque, pero bajo mi punto de vista el 2+1 va a ser una solución insuficiente.
5. Según Ciriza el objetivo de una vía 2+1 es incrementar la seguridad de esta carretera, que soporta un intenso tráfico de camiones. Pero esta opción ni siquiera es respaldada los alcaldes de la zona, tan dados al desvío de los camiones a la A15. ¿Estamos por lo tanto ante una solución que no va a contentar a nadie?
Corre ese riesgo. Salvo que luego en la práctica el 2+1 funcione bien y se demuestre que todos sus detractores estábamos equivocados. Los municipios que colindan con la N121A lo que quieren es el desvío del tráfico pesado a la A15 porque para ellos esa autovía es un 2+2 que ya está disponible. Si el Gobierno de Navarra decide ese desvío el transportista se va a ver muy perjudicado, pues es un recorrido que le ofrece muchas menos ventajas, económicas, de tiempo, de seguridad etc. Y entonces lo único que estaríamos haciendo es trasladar el problema de un lado a otro. Insisto en que merecería la pena estudiar bien la solución de un posible 2+2 a medio o largo plazo en esta carretera. La realidad es que, si por ella va a seguir circulando el transporte, hay que valorar de que soluciones disponemos, que vías de financiación tenemos o de dónde las podemos conseguir.
6. La N121A es una de las dos únicas salidas a Francia para el transporte de mercancías por carretera, entonces, ¿quizá debería ser este un asunto a tratar desde el Gobierno central?
Sí, quizá esa financiación tan necesaria pueda conseguirse desde los presupuestos del Estado o desde la Unión Europea con los fondos Next Generation, ya que gran parte del transporte pesado que circula por la vía es de fuera de Navarra y estamos hablando de un paso transfronterizo, de una carretera que conecta Navarra y España con Francia y Europa. Merece la pena estudiar todas las opciones. Este es un asunto que exige raciocinio y capacidad de servicio hacia los demás. No se debe rechazar el debate que la situación merece. Hay que buscar una solución a futuro y el Estado tiene que involucrarse porque toda España va a ser beneficiaria de esa posible solución.
7. Otro de los problemas a los que se enfrenta el transporte navarro es la imposición de peajes en cinco vías de alta capacidad que el Gobierno quiere poner en marcha a partir de 2022. ¿Qué opinión merece al respecto?
Los peajes son un impuesto que se pone a voluntad del gobernante. Es una decisión puramente política que implica cargar al usuario el coste de las autovías por el gasto que generan. Después entramos en el debate de si se cobra solo al transportista o también a los turismos, de si se cobra solo al de fuera o a todos etc. Es decir, plantea muchos problemas jurídicos y de tipo político que terminan siendo una fuente de conflictos. Lo deseable para todos sería que no se cobrara a nadie, pero esa no es la realidad. Si no se entra en discriminaciones no es algo ilegal, pero los peajes hay que justificarlos muy bien. Si finalmente se establecen estas tasas en las cinco vías anunciadas por el Gobierno, claramente el pagano va a ser el transporte, porque a ningún juez, si no hay discriminación, le va a parecer mal esta decisión. Si hay discriminación por razón del origen o destino ahí si que habrá problemas. Entiendo que al transportista no le haga ninguna gracia esta decisión porque se van a encarecer los costes, pero todo apunta a que la intención del Gobierno es utilizar los peajes en la N121A como medida disuasoria para que decidan circular por la A15. Habrá que esperar para saber que pasa, pero debemos tener claro que sí esto sucede, en última instancia lo que va a ocurrir es que se encarecerán los productos, y quien va a pagarlo es el consumidor final, ósea toda la sociedad, la última pieza del sistema.